Rosita Zubiarrain de Larovere me pidió que agradeciera al hospital municipal "Dr. Raúl Montalverne", ese es el fin, pero que ahondara aún mas. Su afección, luxación de cadera fue solucionada inmediatamente, pero su salud dio un giro extraordinario cuando se le produjo un paro cardiaco Fue una lucha denodada: el staff medico versus el corazón de Rosita, ganaron ellos y, mi amiga, que aún se repone, está con nosotros. Nuestra querida amiga, se había realizado estudios médicos por todos lados, pero fue acá, donde el hilo invisible de la vida casi se cortó; fue acá, rodeada de rostros queridos - sumado al profesionalismo- donde se salvaguardó esta vida y, es acá, donde reside el valor de lo nuestro. El pequeño "mundo" del nosocomio local, estuvo a disposición, como lo está siempre en todo y para todos. Tanto su esposo, familia y amigos, se unen al profundo agradecimiento de la "vasca". Gracias a todos. Stella Bruno. 11.112.385